La clave es no claudicar

Pese a la adversidad ¿qué tal comenzar la semana con un optimismo fortalecido?

Traigo a colación un concepto tan real como motivador o impulsor, si cabe el término, expresado por Henry Ford y es que uno de los grandes hallazgos que uno hace, una de nuestras mayores sorpresas, es descubrir que pudimos realizar aquello que temíamos no poder hacer.

No se trata de fe, ni de esperanza, porque hay hechos tangibles que así lo comprueban. Es sólo proponérnoslo y actuar en pos de ello con la certeza de que obtendremos lo que nos hemos propuesto.

Analicemos nuestro desempeño histórico y, con seguridad, descubriremos varias situaciones que se encuadran en este concepto, existentes en nuestro pasado.

Por lo general es el miedo el que nos paraliza. Decir que nos embarra la cancha sería más adecuado.

Miedo a fallar, miedo a tener éxito (y tener que asumir nuevas responsabilidades), miedo al rechazo, miedo a ser mediocre (por no obtener el máximo resultado), miedo al riesgo.

Todos entendibles, ninguno justificable.

Leí hace poco que la vida es un juego, ¿por qué no jugársela toda en una carta? (Paul Auster en Tombuctú).

Para los efectos que estoy comentando, no se trata de ser tan extremista, sino de arriesgar apenas una situación a una carta. Después de todo, por lo antedicho, las chances de salir exitoso son enormes.

Aún si fuera algo mayor, acaso, ¿nunca ganó un “¡falta envido!” solo con “negras”?

Ten una excelente semana!!!

Autor: Juan Mario Puskovic
Fuente: Underground Management Lessons
Informa: contadoresrosario.com